¿QUÉ FRUTAS Y VERDURAS ESTÁN DE TEMPORADA EN SEPTIEMBRE?
Los melocotones, las nectarinas, las peras de verano, los melones y algunas bayas siguen estando en su mejor temporada a finales de verano.
Entre los melocotones, los mejores ahora son los de viña y llega la esperada cosecha de los melocotones de Calanda, con denominación de origen. Entre las peras, se puede ya disfrutar de otra variedad muy apreciada: la pera ercolina. Y aún maduran sandías y ciruelas que nos permitirán alargar el verano.
Entre las novedades encontramos varias frutas de temporada breve que alegran y suavizan la vuelta a la rutina. Las uvas, sin ir más lejos, pero también los higos y las moras, que ahora están en su mejor momento.
Además arranca la temporada de la manzana, tan beneficiosa para esos órganos digestivos que en esta época requieren más nuestra atención. También se inicia la de otras frutas que se irán consolidando a medida que nos adentremos en el otoño, como el kiwi, el aguacate o el mango.

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A finales del mes de septiembre, incluso podrían llegar alimentos que asociamos con el otoño: los primeros dátiles frescos y los primeros membrillos, chirimoyas y granadas, aunque a veces hay que esperar hasta el mes de octubre.
En la cesta de la compra tampoco faltarán en esta época buenas hortalizas y verduras de temporada. Las acelgas están en un gran momento y siguen creciendo buenas lechugas, berenjenas, calabacines, pepinos, cebollas, pimientos y tomates. Incluso judías verdes.
Pero además llegan los champiñones, algunas coles, puerros más gruesos y las primeras calabazas y boniatos, anunciando también el otoño.
12 FRUTAS Y VERDURAS DE SEPTIEMBRE: ¡INCORPÓRALAS A TU MENÚ!
Aquí tienes una selección de las frutas y verduras que llegan en septiembre o que se encuentran ahora en su mejor momento.

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Quin Engle (Unsplash)
HIGOS RICOS EN CALCIO
En los paseos veraniegos es un placer recoger los higos directamente del árbol y degustarlos a la sombra de la higuera. Son, sin duda, una exquisitez: jugosos, dulces y suculentos.
Pero, además de un regalo para los sentidos, lo son para el organismo. Los higos aportan energía por sus azúcares, que se acompañan de abundante fibra (casi un 3%). Esta es útil frente al estreñimiento y para fortalecer la flora intestinal beneficiosa.
Sus minerales, principalmente calcio, pero también potasio y magnesio, contribuyen a proteger la salud de los huesos.

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UVA DEPURATIVA Y PROTECTORA
Tras un verano caluroso llega la mejor recompensa: unas uvas jugosas y dulces repletas de valiosos nutrientes.
El dulzor se lo otorgan sus azúcares, que proporcionan energía de forma inmediata y se acompañan de fibra y algo de vitamina C.
Sin embargo, por lo que más destaca la uva es, sin duda, por sus antioxidantes. El resveratrol es el más conocido, aunque no el único. Su capacidad para neutralizar radicales libres se asocia a una mayor protección cardiovascular y anticancerígena.
Comerlas con la piel permite aprovechar mejor los antioxidantes y obtener más fibra, que alivia el estreñimiento y favorece la depuración.

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PERA ERCOLINA CONTRA LA HIPERTENSIÓN
La mancha roja que luce esta fina y dulce variedad de pera refleja la zona de la piel bañada por el sol mientras crecía en el árbol. Se cultiva mucho en Murcia, el mayor productor de España y Europa. En Jumilla cuenta con denominación de origen.
En caso de tensión arterial elevada, la pera es una fruta muy aconsejable, pues su abundante potasio y gran cantidad de agua le confieren un marcado efecto diurético y depurativo.
La presencia de fibra y flavonoides es mayor en la piel de la pera que en la pulpa. Si eliges peras de cultivo ecológico, podrás poder comerlas con la piel sin riesgo de ingerir plaguicidas.
Su fibra la hace asimismo algo laxante, lo que resulta útil para aliviar el estreñimiento. Entre sus azúcares destaca la levulosa, bien tolerada por las personas diabéticas.

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MANZANA, UN GRAN DIGESTIVO
A finales de verano arranca la temporada de manzanas. Si bien podemos encontrar cada vez más variedades en los mercados durante todo el año, es ahora cuando empiezan a madurar de forma natural y tienen mejor sabor.
La manzana, bien tolerada por todo el mundo, es ligera y rica en vitamina C: una pieza de 150 gramos aporta el 30% de la que se precisa al día y solo 75 calorías.
Sus ácidos y sales estimulan las secreciones digestivas y ejercen un efecto antiséptico, por lo que despierta el apetito, mejora la digestión y ayuda a mantener la boca sana.
Posee, además, una fibra muy valiosa: la pectina. No solo favorece el tránsito intestinal y protege la flora bacteriana, sino que también contribuye a reducir los niveles de colesterol.
Al igual que con la uva, con la manzana se realizan curas depurativas en los cambios de estación. Se indican frente a la hipertensión, los eccemas crónicos, el ácido úrico, las afecciones hepáticas y las diarreas por gastroenteritis.
Recién cosechada, la manzana resulta más fresca y sabrosa. Puedes disfrutarla al natural, bien lavada y con piel, pero en postres y platos salados te ofrece también infinidad de posibilidades.

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MELOCOTÓN DE CALANDA CON TODOS SUS ANTIOXIDANTES
El esmero con el que se cultiva esta variedad tardía de melocotón amarillo, que crece en la comarca del Bajo Aragón, le ha valido la denominación de origen. Y no en vano. Su pulpa firme y carnosa resulta deliciosamente dulce y aromática.
El secreto de su calidad reside en el embolsado de los melocotones mientras están en el árbol. Entre junio y agosto, se protegen uno a uno para preservarlos de las plagas y las sustancias químicas que puedan emplearse durante el cultivo. Así permanecen al menos nueve semanas hasta su recolección a mano, que se realiza una vez maduros. Al mercado llegan, recién recogidos, entre septiembre y octubre.
Los melocotones, ligeramente laxantes y diuréticos, proporcionan las tres vitaminas antioxidantes que contribuyen a retrasar el envejecimiento: un único fruto de unos 200 gramos aporta el 33% de la vitamina C que se requiere al día, el 15% de la A y el 10% de la E.

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MANGO SUPERVITAMÍNICO
Puedes disfrutar prácticamente todo el año del mango, pues se trae de diferentes países. Sin embargo, desde finales de verano y hasta finales de otoño maduran los mangos que se cultivan en nuestro país, principalmente en la zona de Málaga.
La jugosa y aromática pulpa de esta exuberante fruta tropical inunda la boca de sensaciones cuando se prueba. ¡Y nuestro organismo de nutrientes!
El mango es rico en las tres vitaminas antioxidantes A, C y E, una valiosa combinación para combatir la oxidación provocada por los radicales libres y mantener la salud. Como la papaya, contiene enzimas que lo hacen muy digestivo, y además produce un efecto laxante, útil frente al estreñimiento.
Puedes añadir mango a tus batidos y macedonias o dar un delicioso y sorprendente toque exótico a ensaladas, salteados, pastas y arroces.

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MORAS, HIERRO Y VITAMINA C EN ESTADO SILVESTRE
Despedir el verano con excursiones por el campo ofrece el aliciente de poder recoger por el camino estas sabrosas bayas, aunque si no tienes la oportunidad de comerlas de las zarzas no deberías dejar de aprovechar su breve paso por los mercados.
Las moras, en las que el dulzor de sus azúcares se entremezcla con un sabor ligeramente ácido, albergan en su pequeño interior nutrientes muy valiosos: fibra, vitaminas C y E, ácido fólico y algo de hierro. Pero sobre todo aportan, como otras bayas, el efecto antioxidante de sus antocianinas.
Las antocianinas, responsables del color morado de las moras, protegen la salud cardiovascular y refuerzan el sistema inmunitario.
Además, las moras poseen propiedades astringentes útiles en caso de diarrea, aunque cuando están muy maduras pueden tener el efecto contrario y acelerar el tránsito intestinal. ¡Cuidado si te excedes en tus excursiones!
Aguantan de 2 a 3 días en el frigorífico y pueden congelarse, enteras o en compota.